El mundo que atravesamos actualmente requiere un dominio actualizado de campos cuánticos.
Esta es una de las maravillosas formas de lograr tus objetivos y enfrentarte a un enemigo tan astuto, cambiante y mutante como lo es el CoVID-19. También nos enfrentamos a la incertidumbre de la nueva vacuna en 2021. Toda la humanidad estará en vilo y suspenso preguntándose sobre esto y dudará si debe usar o no esta vacuna o si su por necesidad de mantener un trabajo, viajes de negocios u otras razones básicas como comprar alimentos, medicinas. Pareciera que todo depende de la vacuna.
Por este motivo este taller viene a EMPODERARTE y a OTORGARTE PODERES de Sanación Cuántica aplicada a este tema.
En julio de 2019, esta fue la primera vez que los ángeles nos dijeron que se avecinaba un virus similar al H1N1, y luego, en octubre, nos llevaron a realizar la primera Jornada de vacunación energética contra el virus.
La información que manejamos en Prana Angelical proporcionada por los ángeles es que se trata de un virus creado en laboratorio como es bien sabido por todos.
Este virus La COVID-19 afecta de distintas maneras en función de cada persona. La mayoría de las personas que se contagian presentan síntomas de intensidad leve o moderada, y se recuperan sin necesidad de hospitalización.
Aumenta la frecuencia cardiaca con la intensidad de las subidas de frecuencias.
Este aumento no es lineal y es consecuencia de la regulación hemodinámica para compensar el bajo gasto cardíaco y la caída de la presión arterial. La inervación del corazón altera la morfología de las ondas electrocardiográficas, el ritmo y la conducción cardíaca.
Debido al comportamiento del
sistema nervioso autónomo existe una distribución de arritmias durante y postexposición a +Gz con un predominio del simpático y parasimpático respectivamente. La respuesta nerviosa es capaz de aumentar la presión arterial de dos a tres veces su valor en 5-10 segundos.
Los órganos abdominales y las extremidades inferiores son un reservorio de sangre venosa. Las maniobras de contracción muscular isométricas en piernas, brazos y abdomen facilitan el desplazamiento del reservorio venoso hacia el corazón.
También hemos notado que el virus del COVID ingresa directamente al tracto digestivo generando diarreas, molestias estomacales. Sin embargo, recomendamos realizar escaneo energético, porque las subidas de frecuencias generan o desencadenan un PROCESO de ILUMINACIÓN en algunos seres humanos que practican yoga o alguna herramienta de cultivación.
Estos procesos de ILUMINACIÓN son dolorosísimos y al realizar resonancias magnéticas u otros estudios no logran determinar un diagnóstico clínico.
La consecuencia anatómica es el colapso de los alveólos basales y por tanto la presencia de atelectasias.
La palabra atelectasia procede de atele-vs (incompleto) y éktasis (expansión). Es un trastorno en el cual una parte del pulmón queda desprovista de aire y se colapsa.
Puede ser del pulmón entero o de una parte (lóbulo). Generalmente, se produce por una obstrucción de las vías aéreas o por presión en la parte externa del pulmón. Por ello, los alvéolos se desinflan o se llenan de líquido.
Es una complicación frecuente de ciertos problemas respiratorios. Por ejemplo, puede darse en la fibrosis quística, en los tumores de pulmón, las cirugías torácicas, etcétera. Incluso, puede darse atelectasia tras inhalar un objeto extraño.
La atelectasia puede provocar dificultades en la respiración.
La atelectasia puede no provocar ningún síntoma evidente. Cuando afecta a una parte pequeña del pulmón, o si se desarrolla lentamente, los síntomas pueden ser imperceptibles. Por el contrario, si afecta a un gran número de alvéolos, los síntomas pueden ser graves. También ocurre cuando se instaura con rapidez. Entre los síntomas destacan:
Cuando la respiración se dificulta progresivamente, es esencial consultar al médico.
Hemos dicho en oportunidades que los ángeles hablan del impacto de las frecuencias a nivel cerebral y ocular.
A nivel cerebral genera ACV
A nivel Ocular visión borrosa.
El cerebro recibe irrigación sanguínea de las arterias carótidas internas y vertebrales. La arteria oftálmica, que irriga a la retina, se origina de la arteria carótida interna. A pesar de que la irrigación cerebral y ocular están interrelacionadas existen diferencias respecto a su regulación.
La perfusión ocular no se beneficia de este mecanismo de autorregulación. Cuando la presión de la arteria oftálmica cae por debajo de la presión intraocular (8-22 mmHg) aparecen los síntomas visuales a una intensidad entre 3 y 5 +Gz.